Es normal y lógico ver animales al costado de la ruta en el medio del campo, estén vivos o muertos. A estos últimos les dicen road kill, los que fueron atropellados por autos o camiones. Yo he visto desde quirquinchos como el de la foto hasta ciervos.
La escena más impresionante que vi fue en pleno Hill Country: un grupo de buitres almorzando un cervatillo. Se espantaron y levantaron vuelo cuando pasamos con el auto. Parecía cámara lenta con esas alas enormes y cuerpos pesados. Como las aspas de un molino que recién comienza a funcionar.
Entre los animales vivos, sin contar vacas, toros y cabras, el encuentro más emocionante fue con un correcaminos. Fue en la zona oeste del estado, casi en la cuenca petrolera donde el terreno es una llanura interminable. No me dio tiempo a sacarle una foto, enseguida se metio en los pastizales que bordeaban la ruta. Spoiler: no iba cantando “si estás en la carretera y oyes un beeep beeep …”
En Texas hay muchos ciervos. Tantos, que llegan a ser plaga y se comen las plantas de los jardines de casas en zonas alejadas y cultivos. A pesar de que son muy lindos y simpáticos, son un peligro en la ruta. Se lanzan a cruzar de un salto y causan accidentes. Si de día es peligroso, de noche lo es aún más porque no hay iluminación alguna y directamente no se los ve.
Una noche, estando en la casa de fin de semana de una amiga, una de las chicas se sintió tan mal que pidió que la llevaran al hospital. El más cercano quedaba en Paris (Texas, obviamente) y yo era la única en condiciones de manejar. El camino hacia y desde la ruta no estaba iluminado y mi temor era que se nos cruzara un ciervo.
Puse las luces altas. Shannon, cazadora eximia y ya recuperada de su dolencia, me aconsejó prestar atención a los costados de la ruta por si veía destellos. Resulta que la luz de los faroles se refleja en los ojos de los ciervos y es la única forma de verlos con tiempo para frenar o hacer alguna maniobra.
No sé si eso me tranquilizó o me puso más nerviosa. La cosa es que llegamos a la casa sin mayores novedades.
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